Para los paisanos de Salamanca, La Vega es un barrio
diferente a los demás, de los que ya no quedan. Su paisaje, con calles
estrechas y casa bajas con grandes patios interiores te retrotraen a épocas
pasadas. A tenor de la Ley
19-IV-1939 el gobierno de franco fomenta por primera vez la construcción de
viviendas sociales o protegidas, a través del Instituto Nacional de la Vivienda.
En mayo de 1947 se desliza la
noticia de la probable construcción de un grupo de casas, con capacidad para
650 viviendas, en terrenos la carretera de Béjar. En el mes de agosto se
confirmaría tal noticia De hecho, fue
el propio caudillo el que inauguró el barrio en 1954, alojándose incluso
durante un par de días en una de sus casas. “Si
tiramos todo lo que hizo Franco como dicen, deberíamos tirar este barrio”,
explica José Manuel Almeida, propietario de un kiosco en la plaza desde hace 30
años.
Es un barrio tranquilo, residencial y humilde, pero
con muy buena calidad de vida, mejor que en las urbanizaciones de las afueras, esa
calma que habita en sus calles, poder aparcar sin miedo, sin trafico. En las
noches de verano , los vecinos sacan sus sillas para sentarse a la puerta de
casa y organizan sus pequeños corrillos, de pequeño mis tíos vivían allí y es
un recuerdo que tengo aun, una vida vecinal que se está perdiendo con el paso
de los años.
Lamentablemente con el paso de los años, el número de
negocios se ha visto reducido y apenas parece una zona residencial. Nada tiene
que ver con las vecinas y mas modernas e impersonales zonas, construidas en
plena era de la burbuja inmobiliaria, especialmente “el Zurguén”.
Si damos un paseo por sus tranquilas calles,
notamos la decadencia y el abandono en su conservación por parte del
Consistorio local. “El Ayuntamiento no hace caso a los barrios de la periferia.
La asociación de vecinos es bastante influyente como no puede ser de otra
manera en una comunidad tan unida.
Es
un barrio de gente que pasea, compra el pan y el periódico, chatea sin
internet, a la antigua usanza. Es como un pequeño pueblo dentro de Salamanca,
noches de verano hablando con los vecinos en corrillos, todos los jardines
llenos de rosas, olor a madera quemada en invierno, calles sin apenas tráfico.
Desde
1987 en el café teatro de la Vega se ofrecían talleres de teatro, Maribel y
Miguelón, los chicos de Spasmo ,
incluso el ahora archifamoso Rodrigo Cortes entre
otros pasaron por aquí y dieron origen a un movimiento cultural y artístico que
aun hoy da sus frutos a todos los habitantes de la ciudad. Aquellas representaciones
que se ofrecían los viernes en la parroquia de la plaza del barrio cambiaron en
2009 y según dicen por cosas que molestaban al ayuntamiento de Salamanca por lo
han trasladaron al CAEM, para tener controlada cada una de las actuaciones que
se llevaran a cabo. Cambiaron al
director, lo oficializaron y terminaron con la iniciativa, otro gran evento que
debemos de agradecer a Julian Lanzarote…(como no).
Entendido
en sentido amplio, el barrio recoge La Vega, San Jose ( posterior) y el
denominado barrio del matadero, para los visitantes, aquello que esta a la
izquierda del rio Tormes, lo que se ve desde la Catedral. Aquí también reside
el decano de los equipos de futbol de la ciudad, el Real Salamanca Monterrey C.F.
muy cerca podrás parar a tomar unas cañas en los bares de la plaza,
especialmente donde “Toño”, si quieres comer bien y barato no puedes faltar al
Guinaldo, en C/ Juan de Austria, come lo que quieras, esta todo buenísimo.
Equipo Alevin A del Real Salamanca Monterrey C.F. ¿adivináis quien es la hija de uno de nuestros bloggers? |
Evidentemente,
me dejo mucho en el tintero, pero es una aproximación y homenaje para que todos
conozcáis mejor Salamanca.